Equino

   En tercera, conduciendo con el viento entrando por la ventanilla y una sonrisa en la cara. Cuando haces lo que te gusta, lo sabes.

   Sonará típico pero la sonrisa de esos nenes al llegar y al irse, el abrazo repentino o simplemente tener que corregirlos por que lo están haciendo mal acaba enamorándome.

   El momento en el que te das cuenta que esto es lo tuyo, lo que quieres y tienes que hacer en tu vida, ese momento es magnífico. Aunque en si no es el momento, es después cuando dices DIOS HA SIDO PERFECTO!  Y si, me duelen las piernas, y la espalda, me han picado unos mosquitos asesinos, me he quemado la cara y hacia un calor deshidratante hasta para una medusa, pero también ha sido una mañana de aprendizaje, de juegos, de canciones y de mucha diversión.

Así que os invito a todos a que encontréis eso que os llene, porque de verdad que es impresionante.
Hoy no soy ni sutil ni borde, hoy es día
de playa y de amor.